Arch Rivals

Este fin de semana se ha celebrado el All Star de la NBA con los hermanos Gasol estelarizando el encuentro según la prensa española, yo la verdad es que viendo las estadísticas del partido con 10 y 6 puntos respectivamente tengo serias dudas de que hayan sido los cracks indiscutibles del evento. Aunque hay que reconocer el esfuerzo y el mérito es curioso como alteran la realidad los medios deportivos españoles para atraer la atención del lector. El caso es que vengo hoy a hablar de un juego de baloncesto bastante “reshulón”, muy arcade y poco dado a florituras: se trata de Arch Rivals en su versión para Mega Drive.

Flipo con el que está colgado del aro.

Flipo con el que está colgado del aro.

El juego fue desarrollado por Midway en 1989 para máquinas arcade y siendo portado más tarde para Nes y Mega Drive, versión en la que centraremos esta review. Arch Rivals plantea un basket bastante peculiar, en una cancha con equipos de dos jugadores en partidos en los que la violencia no se castiga por el arbitro. Podemos repartir hostiejas a diestro y siniestro, tumbar a nuestros oponentes y robar el balón de forma violenta con total impunidad. Evidentemente el que más puntos meta es el que acaba ganando, tan sencillo como eso.

Toma guantazo pringao...

Toma guantazo pringao…

En el apartado jugable nos encontramos una mecánica innovadora para la época en la que el jugador controla solo a uno de los dos miembros del equipo mientras que el otro es controlado por la máquina y que aunque se mueve libremente por el campo obedece a ciertas órdenes como pasar o tirar a canasta cuándo pulsamos los botones del pad. Este tipo de control que sería perfeccionado más tarde en el NBA Jam de la propia Midway permite desarrollar jugadas efectivas como desmarques, asistencias al espacio, bloqueos, etc.

In your face perdedores

In your face perdedores

Arch Rivals consta, en su versión de Mega Drive de tán solo cuatro equipos, , algunos basados en ciudades con equipos de la NBA y facilmente reconocibles en sus colores y otros inventados. Independientemente del equipo que escojamos podremos elegir además los jugadores entre un elenco de ocho con diferentes habilidades lo que permite varias configuraciones de equipos distintas. Lamentablemente y siendo este el gran punto flojo del juego no podemos participar en torneo, liga o campeonato alguno limitándose el juego a simples partidos amistosos (aunque de amistosos tienen poco ya que las hostias se suceden a base de bien).

Es complicado pedirse a otro que no sea Mohawk, el moreno con cresta , Muy Mr. T el hombre.

Es complicado pedirse a otro que no sea Mohawk, el moreno con cresta. Muy Mr. T el hombre.

Tecnicamente al ser un port de un arcade de 1989 pero lanzado en 1992 no nos encontramos con ninguna maravilla y más bien podríamos considerarlo un juego “pobre” para el sistema de 16 bits de Sega, con unos gráficos y efectos sonoros bastante discretos. Además el motor del juego no está todo lo testeado que debería siendo bastante fácil anotar desde casi lugar de la cancha. Pese a los defectos puede resultar bastante entretenido en modo de dos jugadores.

¡En suspensión prehmo!

¡En suspensión prehmo!

Arch Rivals no es ninguna maravilla del ocio electrónico pero puede servir como entretenimiento ocasional de forma bastante decente. Y aunque no ha pasado como un gran clásico a la historia de los videojuegos si que sentó las bases del recordadísimo y ya mencionado NBA Jam, dejo un video para mostrar el videojuego (cortesía de Megadrive Channel) y quien sabe, quizá despertar el gusanillo de algún curioso que quiera probarlo en emulador o en soporte físico.

La cheerleader groupie de Mohawk.

La cheerleader groupie de Mohawk.